jueves, 7 de enero de 2010

LA HUELGA AGRÍCOLA DE 1932 EN FACINAS

HISTORIA CONTEMPORÁNEA.ALJARANDA, 63. DICIEMBRE 2006.

Habiéndose incumplido por parte de los patronos de la Aldea de Facinas y alrededores, el acuerdo existente que mantenían con los obreros del campo, pertenecientes al Centro de Oficios Varios de Facinas y del incumplimiento del Decreto de Laboreo, por el cual, se había sembrado y labrado menos que años anteriores, suprimiéndose así las pertinentes escardas y las distintas labores según el tipo de siembra y conllevando dichos recortes de peonadas, a una angustiosa situación de los obreros por paro forzoso.

El día 10 de Abril de 1932, después de reunida la Asamblea Ordinaria del Centro de Facinas, se acuerda dar un plazo de dos días a los patronos para que regularicen la situación existente en la zona. Debiendo proceder a la colocación de los labradores para la escarda de todos los sembrados, dando así ocupación a los numerosos trabajadores agrícolas que se encontraban sin trabajo.

Pasado el plazo y sin haberse producido el acuerdo deseado por los obreros del campo del Centro de Oficios Varios de Facinas, el día 12 de Abril de 1932 se declaran en huelga.
El día 15 del mismo mes se celebra en Facinas una reunión presidida por el Alcalde de Tarifa Don Amador Mora y asiste el Ingeniero de la Sección Agrónoma de la Provincia Don José Sidón, los patronos y una comisión de los trabajadores afectados, representados por el Presidente del Centro de Facinas Don Diego López.

En dicha reunión se llego a un acuerdo en el que se pactaron varios puntos, que fueron:

*La obligación por parte de los patronos de colocar a los todos los obreros parados.
*Reparto proporcional de obreros según la importancia del patrono.
*Compromiso por parte de la clase patronal de abonar a los obreros los jornales correspondiente a los días de huelga.
*La obligación por parte de la clase obrera de restituirse al trabajo dando por finalizada la huelga.

Con estas bases se dio por finalizado el conflicto con un franco y decisivo triunfo por parte de los trabajadores, como no podía ser menos, dada la justicia de las reclamaciones.
En el local del Centro de Oficios de Facinas, aguardaban mil y pico obreros del campo esperando el regreso de los compañeros designados para tratar con los patronos.
Una vez llegada la comisión, el Presidente del Centro, dirigió la palabra para explicar a los allí reunidos el contenido del pacto. A lo que dichas palabras fueron coronadas por una imponente ovación por el feliz resultado obtenido por la clase Obrera Campesina.

Transcurrido varios días, algunos obreros, al presentarse a su lugar de trabajo correspondiente, no fueron admitidos.
Viéndose obligado el Presidente del Centro Obrero de Facinas, Don Diego López Rubiales, a presentar una denuncia ante el Sr. Gobernador Civil de la Provincia por el incumplimiento por parte de dos patronos de lo acordado en la reunión del 15 de Abril.
Mientras, los obreros no admitidos, siguieron presentándose a su lugar de trabajo durante siete días seguidos con igual fortuna. Por fin, al octavo día, en una de las fincas fueron admitidos, aunque sin querer pagarle los anteriores. En la otra finca implicada fueron admitidos diez de los doce obreros que le correspondían.

Aunque en los distintos artículos de donde se ha conseguido toda esta información, dice, que la huelga se había mantenido dentro de los límites de la más estricta seriedad y prudencia por el gran número de obreros que la secundaron, algunos vecinos de Facinas que aunque de niño vivieron aquella huelga y otros que saben de ella por haberle contado sus padres como transcurrieron aquellos días, coinciden en que no fue tan bonito como se pinta, se crearon piquetes, algunos con actitud violenta, obligando a muchos campesinos a secundar la huelga.

Existe un panfleto que fue repartido por Facinas y sus alrededores, animando a los jornaleros a que secundaran la huelga. Dicho panfleto que tengo en mi poder y que colgaré en este blog más a delante, es una muestra más de lo que sucedió en nuestro pueblo en dicha época.

(Fuente: Recortes del periódico de la época Vox Pópuli,
del 11 al 30 de abril de 1932).